En esta semana en la que
se conmemora el Día contra la violencia
de género es importante que reflexionemos sobre este grave problema social,
que está acabando con la vida de cientos
de mujeres, y que en muchas ocasiones se genera en la adolescencia, durante la etapa del noviazgo, dado que cada vez son
más las adolescentes que sufren este tipo de violencia ya sea por maltrato físico o por maltrato psicológico.
¿Por qué se genera?
¿Cuáles son los pasos previos? ¿Cómo se llega a la espiral de la violencia de género?.
A la violencia de género se llega por distintos caminos que confluyen en los
celos, en una idea equivocada de las relaciones amorosas y en el sobrecontrol enfermizo
de la pareja. Las cifras son demoledoras. A fecha de esta
reflexión han muerto ya 44 mujeres que han sido víctimas de la
violencia de género. Ya hemos igualado la cifra de todo el 2016. En 2015 fueron
60 las víctimas mortales; en 2014, 55; en 2013, 54 ….. y podríamos seguir retrocediendo en el tiempo, y las cifras aumentarían, y todo ello a pesar de las campañas, de los vídeos, de los anuncios que se muestran para concienciar a la sociedad sobre este tema.
La violencia de género
no es algo que salga solo en los medios de comunicación. La tenemos cerca,
convive con nosotros. Ejemplo de ello, lo encontramos en la localidad de
Lebrija el año pasado. Allí, un hombre –que vivía en El Cuervo y con orden de
alejamiento de su esposa- fue a su domicilio de Lebrija, la asesinó a puñaladas, la tiró
por el balcón, y no contento con ello se
ensañó con la víctima atropellándola con su furgoneta. Este hecho tan
espeluznante nos da para pensar mucho: ¿qué estamos haciendo como sociedad?
Erradicar la violencia
de género no es tarea fácil y me consta que muchas instituciones trabajan de
manera conjunta para ello. No obstante, me gustaría subrayar algunas de la posibles
soluciones: poner fin a la impunidad en la que se encuentran algunos
maltratares; brindar u ofrecer mayor formación a los jóvenes para que sepan
detectar a tiempo la violencia de género, otorgar recursos públicos adecuados
para ejecutar las leyes y políticas existentes, aumentar la conciencia pública
y la movilización social, involucrar a los medios de comunicación de masas, y movilizar
a toda la sociedad.
La violencia de género
es, en definitiva, uno de los grandes problemas que debe afrontar con decisión
la sociedad española. Por todo ello, debemos estar unidos y concienciados desde
temprana edad y no permitir que ninguna mujer muera a mano de su pareja o
expareja.
Luchemos juntos contra la violencia de género.
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