jueves, 10 de octubre de 2013

El rey pescador.


Iniciamos la sección Cine y Literatura de la quinta temporada de nuestra radio escolar con una película que no es una adaptación cinematográfica de una obra literaria, pero que, sin embargo, incluye referencias a  motivos literarios que considero de interés. Se trata de una de mis películas preferidas: El rey pescador, una cinta del año 1991, dirigida por Terry Gilliam (el director de Las aventuras del Barón de Munchausen en 1988), e interpretada en sus papeles principales por Jeff Bridges y Robin Williams. 

Esta película obtuvo en 1991 cinco nominaciones a los Oscar y un Oscar a la Mejor actriz secundaria (Mercedes Ruehl), además de  dos Globos de Oro por Mejor actor de comedia (Robin Williams) y Mejor actriz secundaria (Mercedes Ruehl), dos nominaciones a los Premios BAFTA, Mejor película en el Festival de Toronto y el Premio León de Plata al Mejor director en el Festival de Venecia del citado año.


Este filme nos cuenta la historia de un famoso, sensacionalista y engreído locutor de radio,  Jack Lucas (Jeff Bridges), que conduce un programa nocturno en la ciudad de Nueva York, muy mediático y exitoso, consistente en dar consejos a los radioyentes que llaman para contar sus problemas y pedir ayuda. 



Pero de la noche a la mañana, la vida de este locutor de radio cambia por completo cuando el consejo que da a unos de sus radioyentes tiene consecuencias fatales y esto provoca que su carrera profesional se venga abajo y con ello su vida. A partir de ese momento se abandona y se sumerge en la bebida buscando su propia destrucción.  Sin embargo, cuando todo está a punto de terminar para él, un grupo de indigentes liderados por Parry  (Robin Williams), lo salvan y su vida empieza a cambiar. Sin darse cuenta se ve implicado en la vida de este singular personaje, que no es sino un pobre profesor de historia que perdió la razón y que –creyéndose caballero andante- vive obsesionado con conseguir a una bella dama (una oficinista a la que le encanta la literatura rosa) y con encontrar el Santo Grial para lograr así la felicidad y su  propia salvación.



Perceval de Chrétien de Troyes
Así pues, en esta cinta se conjugan motivos literarios como la búsqueda del Santo Grial y la figura del caballero andante, pues Parry es una especie de Don Quijote y Jack, un peculiar Sancho Panza, que se ve abocado a la búsqueda del cáliz sagrado que Jesus usó en la Última cena y que José de Arimatea  utilizó posteriormente para recoger la sangre emanada del costado de Jesucristo tras la herida abierta por la lanza de Longino de Cesarea.

El Santo Grial ha sido motivo de inspiración en la literatura, en el arte y en el cine desde que el escritor francés Chrétien de Troyes lo mencionara en su famosa obra Perceval, compuesta entre 1181 y 1191. En esta obra se cuenta la historia de un caballero de la Mesa  Redonda, Perceval, que llega al castillo del lisiado Rey Pescador, Rey Tullido o Herido y que logra curarlo y salvar también su reino al mismo tiempo que completa la búsqueda del Santo Grial. Como podréis observar el título de esta película constituye en sí mismo una referencia a la historia de Chrétien de Troyes y por extensión a todo el ciclo artúrico.
Galahad, Bors y Perceval logran el  Santo Grial
Os recomendamos, pues, esta magnífica película, con la que seguramente disfrutaréis. El final es un poquito pastelito, pero el guion es magnífico, la historia también y por supuesto, la interpretación de los actores principales.


Bibliografía consultada.

http://es.wikipedia.org/wiki/Perceval

2 comentarios:

GEHA dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
GEHA dijo...

Magnífica película que, como un juego de cajas chinas, contiene varias, unas dentro de otras, ofreciendo una múltiple propuesta argumental en la que, como muy bien ha señalado el profesor Tinoco en el programa, encontramos referencias a la leyenda del Santo Grial y a los personajes cervantinos de Quijote y Sancho. Además de ello, se pone en cuestión (aunque de modo epidérmico) la estructura sociopolítica y económica de nuestro tiempo, aunque sin llegar a cuestionar la validez del sistema. En definitiva, estamos ante una obra, quizás la más apreciada de su director, en la que se edifica un particular clima de fábula en el que, como tantas veces, se lanza el mensaje de que el ser humano está vacío si se despoja de los sueños (=esperanzas). Bonita consigna, aunque quizás demasiado optimista, para los tiempos que nos ha tocado vivir.
Feliz con el reencuentro con “Jueves de Cine”, quiero una vez más mostrar mi reconocimiento a la extraordinaria labor pedagógica y cultural que estos programas suponen para los muy afortunados alumnos del IES “Laguna de Tollón”.