martes, 5 de marzo de 2013

Popkesí: ... Y lo clásico se hizo pop


 Hoy oiremos música clásica convertida en canciones pop, de ahí el título de nuestro programa … Y lo clásico se hizo Pop lo que para algunos puristas puede ser una herejía.
La auténtica princesa del pop español es, sin duda, Karina, que cumple este año sus cincuenta años de carrera con momentos verdaderamente gloriosos. Concierto para enamorados es una preciosa canción de la que Karina ha hecho cuatro versiones, la primera de 1966 aunque nosotros hemos elegido la más conocida, de 1971.
Johann Sebastian Bach compuso entre 1722-1725 una serie de piezas fáciles para aprender a tocar el clave como regalo a su segunda esposa: el “Pequeño Libro de Anna Magdalena Bach”. Una de estas piezas, el Minueto en Sol Mayor, la más célebre de la colección, sirvió de base al grupo The Toys para su “A lover's concert”. Karina supera al original con una de sus interpretaciones más logradas y recordadas con arreglos de Rafael Trabuchelli, que procedía de la música clásica.

Una de las canciones más conocidas de la historia de nuestra música es El Himno a la alegría de Miguel Ríos. Hemos elegido una versión en directo con Ana Belén, Víctor Manuel y Joan Manuel Serrat en la gira “El gusto es nuestro” de 1996. Miguel Ríos, que se despidió de la escena musical hace un par de años tras casi cincuenta años de carrera, grabó en 1969, y con arreglos de Waldo de los Ríos, el Himno a la alegría,  una adaptación del coral que ocupa la segunda parte del último movimiento de la Novena Sinfonía que compuso en 1824 Ludwig Van Beethoven. Era muy inusual incluir una pieza vocal en una sinfonía que, por definición, es una composición instrumental. Este tema surgido en plena era del rock sinfónico y grabado por Miguel en inglés con el título A Song of Joy, alcanzó fama mundial en 1970, vendiendo siete millones de copias en todo el mundo y llegando a n.º 1 en Estados Unidos, Alemania, Francia, Italia y Reino Unido, además de tener gran éxito en otros países como Japón, Suecia, Austria, Holanda, Canadá... En España la edición del single encumbró al artista y es la transición entre su primer Lp y el segundo  “Despierta” editado en 1970 con atmósferas hippies y rockeras lejanamente imbuidas de rock sinfónico y en el que aparece este tema.

Olé-Olé nace en 1982 en un deseo de CBS de repetir el éxito de Mecano e, incluso, Nacho Cano les cede su primer hit: el mítico No controles. En principio el grupo estaba formado por Luis Carlos Esteban, Juan Tarodo, Emilio Estecha, Gustavo Montesano y, su primera cantante, Vicky Larraz. Su primer álbum,  “Olé-Olé” de 1983,  de marcado sonido tecnopop llevó al grupo al éxito de ventas que ya no abandonó en toda la década. El primer single de este álbum fue Conspiración, una versión de la Habanera de la ópera Carmen de Georges Bizet, de 1875, y que sirve para la presentación de la contestataria, inconformista e independiente Carmen en escena. La canción con ritmos muy de la época conserva parte de su dramatismo gracias a la interpretación de Vicky y cosechó un importante éxito en Europa, sobre todo en Italia.

Alameda es uno de los grandes representantes del rock andaluz; pertenece a una segunda ola de este movimiento y fue desde su concepción un auténtico supergrupo pues sus componentes habían pertenecido a bandas promotoras de este género. Debutaron con un soberbio disco en 1979. El cuarto, de 1983, fue “Noche andaluza” con el que obtuvieron un gran éxito comercial pues el single fue el más vendido de la historia del grupo y su tema más recordado. Noche andaluza es una adaptación de la Danza española nº 5 “Andaluza”, de Enrique Granados, compuesta entre 1892 y 1900. Es una pieza para piano solista perteneciente a una colección de doce. Es la más célebre de la colección junto a la nº 2 “Oriental”. Es música nacionalista que se basa en material folklórico, armonizándolo según los preceptos de la música culta. Y que Alameda interpretó con evidente buen gusto.

“La zarzuela +  pop” es un disco de 2007 en el que varios artistas versionan temas de zarzuela.  El disco se abre con un dúo excepcional: El del argentino Andy Chango y el exvocalista de Gabinete Caligari, Jaime Urrutia, cantando Las  Coplas de Don Hilarión que pertenece a la La Verbena de la Paloma, de Tomás Bretón, de  1894. Esta zarzuela nos cuenta la historia de un “viejo verde”, el boticario Don Hilarión, que llena de regalos a dos jóvenes, Casta y Susana, que están con él, naturalmente, por su dinero. El novio de Susana, Julián, tendrá un enorme ataque de celos durante la celebración de la verbena de la Virgen de la Paloma en Madrid. Las “Coplas de Don Hilarión” nos muestran al personaje recreándose en la idea de pasar la velada con las dos chicas, de las que no sabe “cuál de las dos le gusta más”. En La Zarzuela + Pop se puede apreciar el esfuerzo llevado a cabo por grandes voces de la música actual para hacer compatibles los ambientes del siglo XIX con los instrumentos más modernos como guitarras eléctricas, teclados y percusiones.

El madrileño Javier Álvarez interpretaba sus primeras canciones con su guitarra en el metro y en el Retiro. El productor Gonzalo Benavides le vio potencial y en 1995 publica su primer disco, un insospechado éxito que convierte a Javier en el no pretendido cabecilla de un nuevo y artificial movimiento de jóvenes cantautores. Luego ha editado seis álbumes más y numerosas colaboraciones, entre ellas Los couplets babilónicos que aparecía en el experimento “La Zarzuela + Pop” de 2007, un aria para mezzo-soprano cantada por el personaje de Lota, el objeto de tentación de José en “La Corte de Faraón” de Vicente Lleó, de 1910, parodia bíblica de la historia del casto José, que sirvió para criticar con sarcasmo la sociedad de la España de la Restauración. Este tema ya fue popularizado en 1985 por Ana Belén en la película de José Luis García Sánchez basada en la misma zarzuela.

Y terminamos con La Compañía, un grupo de ocho voces, cuatro masculinas y cuatro femeninas,  diseñado desde un despacho por Rafael Pérez Botija con la idea de revitalizar la zarzuela mezclándola con ritmos pop. La CBS se interesa por este proyecto que ellos llaman Zarzuela rock y en 1971 sale su primer sencillo: El Soldadito que respeta el aire festivo y costumbrista de la zarzuela pero envuelta en los arreglos más comerciales de la época. La canción arrasa y alcanza el nº 1 de ventas durante tres semanas. Rápidamente se publica el primer Lp “Reestreno” en 1971 que reforzó el particular estilo del grupo con diez temas versionados del género chico. El Soldadito está basado en la "Canción del Saboyano" de “Luisa Fernanda”, compuesta por Federico Moreno Torroba en 1932. La zarzuela narra un conflicto amoroso entre cuatro personales: el hacendado extremeño Vidal que está enamorado de Luisa Fernanda, que ama al militar Javier, que a su vez pretende a la duquesa Carolina. Todo ello en medio de la revolución de 1868 que destronaría a Isabel II de España. El grupo La Compañía acabaría disolviéndose en 1976.

Fuentes:
http://lafonoteca.net/grupos/karina
http://es.wikipedia.org/wiki/Miguel_R%C3%ADos
http://lafonoteca.net/grupos/miguel-rios
http://lafonoteca.net/grupos/ole-ole
http://lafonoteca.net/grupos/alameda
http://www.eldiariomontanes.es/20071105/cultura/musica/zarzuela-adapta-lenguaje-20071105.html
http://lafonoteca.net/grupos/javier-alvarez


1 comentario:

GEHA dijo...

En mi opinión, si nos distanciamos de la clasificación pormenorizada de períodos, estilos y géneros, existen dos tipos de música: la buena y la mala. Para los que observan con rigidez y un punto de esnobismo la mal llamada música “clásica” (el Clasicismo es un estilo concreto) o la denominada, con una cierta pedantería, música “culta”, todo lo que se escucha en este nuevo programa de “Popkesí” es un atentado a obras muy importantes en la historia de la música. Mi clara preferencia por este tipo de composiciones en su versión original, tal y como fueron concebidas por sus geniales autores, no me impide disfrutar y divertirme con esta nueva mirada, un poco iconoclasta, procedente del mundo del pop. No creo que estemos, pues, ante la “mala” música frente a la “buena”. Los ejemplos que nos brinda el programa son significativos. Como puede observarse, los estilos de las versiones y recreaciones son múltiples, como también lo son los de los compositores y géneros convocados. De la mezcla, si está realizada con ingenio, pueden salir propuestas interesantes. Es curioso, por ejemplo, observar la riqueza armónica, melódica y estructural de estas composiciones sobreviviendo a los cambios de instrumentación o ritmo impuestos por los códigos del pop. Es como si pudiéramos percibir los valores intrínsecos más definitorios de estas piezas de un modo aún más claro.
Asimismo, se cuenta con otra ventaja: la de difundir esta música entre públicos no proclives a un acercamiento a composiciones de este calibre. Quizás algunos oyentes sientan la curiosidad o la necesidad de escuchar las obras originales, con el oído un poco más familiarizado y receptivo.
Naturalmente, los resultados de estas adaptaciones son desiguales. Desde mi punto de vista, algunos son más acertados que otros, y en ello está el alimento de la habitual controversia que rodea este tipo de ejercicios creativos. Menos mal que el responsable de “Popkesí”, libre de cualquier prejuicio y con una actitud intelectual muy abierta, nos ha seleccionado muy acertadamente un conjunto de canciones que contrastan bien, que nos muestran el poliédrico mundo de la creación musical sin el lastre de una veneración mal entendida de los clásicos, en la que hay de todo: desde la hoy un poco envejecida “Conspiración” de Olé-Olé a la versión que me parece más ingeniosa, por ser muy libre con respecto al original y conseguir que suene auténticamente pop sin perder su calidad esencial: “Las Coplas de Don Hilarión” de Andy Chango y Jaime Urrutia. Es la canción que, paradójicamente, más se aparta del original y, a la vez, más lo respeta de las que escuchamos en el programa.
Muchas gracias por este rato tan estupendo y enhorabuena por el trabajo de promoción cultural desarrollado, de forma muy generosa y altruista, por el equipo que hace realidad el proyecto de radio del IES “Laguna de Tollón”.