El viernes 7 de marzo, el
alumnado de Historia del Arte y buena parte de 2º B de Bachillerato, acompañados por los profesores Alfonso Romero y Javier Tinoco, del
Departamento de CC.SS., Geografía e Historia, desarrollaron la actividad
CÓRDOBA CON ARTE 2014.
Con ella se pretende un acercamiento directo
al ARTE CALIFAL, que en estos días venimos trabajando en clase, aunque también
nos aproximemos a obras pertenecientes a otros periodos que podemos admirar
durante la actividad. Para ello, empezamos con una visita al yacimiento arqueológico de la ciudad palatina
de Madinat Al-Zahra, situada en las inmediaciones de Córdoba.
El inicio ya es
prometedor: un magnífico edificio contemporáneo, al pie del conjunto, con un diseño que
te acoge en un espacio pleno de luminosidad natural y que ofrece continuas
oportunidades de admirar desde su interior el paisaje natural del entorno, con
el que se fusiona de forma armónica.
Un interesante documental nos recibe para
facilitarnos la comprensión del que probablemente es uno de los yacimientos
arqueológicos medievales más importantes del mundo.
A partir de ahí, una aproximación a las
piezas más emblemáticas del arte califal, con una cuidadísima selección y un
excelente diseño expositivo.
Ello nos permitió disfrutar de obras de arte tan
excepcionales como el ciervo de bronce del siglo X d.C., maravillosa
representación de este bello animal que
constituía probablemente un surtidor de una fuente o alberca cercana al Salón Rico de la ciudad palatina.
Otro de los aciertos de este bello edificio, que ha recibido algunos de los premios más importantes de la arquitectura contemporánea (Premio Aga Khan 2010) o de museografía (Premio al Museo Europeo del Año 2012), es facilitar una organización del espacio útil para el desarrollo de las tareas de conservación e investigación del yacimiento arqueológico.
Si además estos espacios instrumentales pueden
ser apreciados al menos en parte por el visitante, que tiene la posibilidad de entrar a valorar el
desarrollo de estos trabajos y el proceso que experimenta una pieza desde su
hallazgo, mejor que mejor. Aquí podemos ver a nuestras alumnas percibiendo la
importancia de estos procesos.
Para terminar nuestra exploración por la ciudad palatina de los califas omeyas, realizamos un recorrido que probablemente coincidiría en parte con el que efectuaban las embajadas que venían a ofrecer sus respetos a los que entonces eran los monarcas más poderosos del occidente europeo.
Tras una intensa mañana de exploración, vuelta a
Córdoba, y un rato para la comida en el entorno de la Mezquita-Catedral.
Después, visita al que es uno de monumentos más visitados de España.
Allí
pudimos apreciar el gran Patio de los Naranjos, y comprobamos sus principales
elementos y funcionalidad original.
Después accedimos a la Sala de Oración, donde
a partir de un criterio de evolución cronológica de este monumento (con más de 1.200 años, 1.500 si consideramos la anterior Basílica
visigoda de San Vicente), pudimos admirar sobre el terreno las sorprendentes técnicas
arquitectónicas utilizadas, el acarreo y reutilización de materiales muy
anteriores y, en definitiva, las diferentes ampliaciones y etapas del edificio hispanomusulmán,
hasta llegar a sus más recientes fases cristianas.
Para finalizar, un paseo al atardecer en una
preciosa tarde de primavera, atravesando el Río Guadalquivir por su bimilenario
y remozado Puente Romano, despidiéndonos así de Córdoba con ganas de volver muy
pronto.
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