Hoy nuestro espacio de radio está ocupado por uno de los grandes grupos de nuestra música y referente indiscutible, junto a otros grupos, de la Movida Madrileña: Nacha Pop, autores de algunas de las mejores canciones de nuestro pop que forman parte de la memoria colectiva de varias generaciones. Estuvieron activos entre 1978 y 1988 y sus componentes fueron: los primos Antonio Vega y Nacho García Vega, Carlos Brooking y Ñete, a la batería, que fue el último en incorporarse al grupo.
Comienzan a finales del 78, en el 79 telonean a Siouxsie & The Banshees y actúan en la presentación de Paraíso. En el 80 editan su álbum de debut “Nacha Pop” que tiene muy buena acogida. Es uno de los mejores discos del pop español, lleno de vitalidad, brillantes composiciones, sonido luminoso y una marcada influencia de la new wave británica. La revista Efe eme en 2003 lo colocó en el octavo lugar de los 100 mejores discos pop. De él hemos elegido la melancólica Chica de ayer, el tema de mayor éxito de la banda y uno de los himnos de La Movida, ¿Quién no ha oído? “Un día cualquiera no sabes que hora es / te acuestas a mi lado sin saber porqué / las calles mojadas te han visto crecer / y tú en tu corazón estás llorando otra vez”
Tras su debut fueron teloneros de los Ramones y actuaron en lugares míticos como Rockola. En el 82 publican su segundo álbum “Buena Disposición” que mantiene los esquemas de su primer disco aunque, en lugar de estar producido por Teddy Bautista, son ellos mismos los productores y fueron capaces de conseguir que estas canciones sigan sonando actuales a pesar de los treinta años transcurridos. Hemos elegido la enérgica e intensa Reflejo de ti que tiene un comienzo con aire siniestro que recuerda a grupos post-punk de principios de los 80; esta versión es una actuación en directo de 1983, una de las grandes bazas del grupo.
En 1983, abandonan Hispavox porque, como ocurrió con la mayor parte de los grupos de la época, las discográficas no cubrían sus expectativas en cuanto a ventas y firman por DRO, con la que lanzan, “Más Números, Otras Letras” , un disco irregular que pierde la frescura y la intensidad de los dos primeros pero que se enriquece con la introducción de teclados y sintetizadores, tan de moda en la época. Es un álbum más pausado que destaca por su conjunto más que por canciones puntuales aunque hemos elegido su momento cumbre: la vibrante Enganchado a una señal de bus, que dice: “No comprendo cómo puedes acostarte / para no dormir y luego levantarte / no comprendo la velocidad del tiempo / ni a la gente que no mueve ni un momento / voy andando hacia ningún lugar”. Con este disco no alcanzan el éxito masivo pero sí el reconocimiento de la crítica, como era habitual.
En 1984 sale a la luz “Una décima de segundo”, un maxi de cinco canciones entre las que sobresale la que da título al disco, Una décima de segundo, uno de las mejores temas surgidos del talento de Antonio Vega, en la que se unen física y poesía. El tratamiento de la canción es simple con la voz de Antonio en primer plano entre acordes limpios y una batería que sorprende por su claridad. El disco incluye una versión piano-bar con los teclados de Teo Cardalda. Con este maxi dieron por finalizada su corta estancia en DRO.
En 1985, y en la discográfica Polydor, editan uno de sus mejores trabajos: “Dibujos Animados”, un disco de madurez con un sonido más profesional y limpio que cuenta con la gran producción de Peter McNamme. Las voces siguen en primer plano y son Antonio y Nacho los ejes de las canciones aunque el sonido se enriquece con trompetas y teclados electrónicos. Hemos elegido dos temas. El que abre el disco es Grité una noche en el que la voz de Nacho da botes y en la que el grupo recupera su energía y frescura con guitarras de aire reggae y una llamativa orquestación y Relojes en la oscuridad, una perfecta canción pop, fresca y desenfadada, de ritmo frenético y una gran riqueza instrumental, reflejo de la madurez que han adquirido, destacando de nuevo los vientos y los ritmos acústicos de guitarra. Tras este disco Ñete deja la banda por desavenencias con el resto de los componentes y lo sustituye Sergio Castillo que no formará parte del grupo.
El cuarteto, ahora trío, se encuentra en uno de sus mejores momentos creativos como confirman en su último disco de estudio titulado precisamente “El Momento”, de 1987 producido por Carlos Narea y que supone su consolidación definitiva en cuanto a reconocimiento público y ventas. Pero, lamentablemente, la realidad se impone y las diferencias entre los dos compositores del grupo: Antonio y Nacho son cada vez mayores hasta el punto de que cada uno compone cinco temas del disco. La separación ya se vislumbraba. Hemos elegido uno de mis temas favoritos, el que abre el disco: No se acaban las calles, una canción en la que se unen fuerza y melancolía y Lucha de gigantes que formaría parte de la película Amores Perros de Alejandro González Iñárritu de 2000, una canción trascendente a través de su sencillez en la que la letra muestra la pequeñez y la fragilidad del individuo ante un mundo descomunal y lo perdidos que estamos ante una realidad que muchas veces nos sobrepasa.
En su cima creativa el grupo se separa y se despide, ante una multitud entregada, con dos conciertos en la sala Jácara de Madrid en octubre de 1988 que quedan plasmados para la posteridad en el disco “Nacha Pop 80-88”. Punto y final de uno de los grupos más inolvidables de una década irrepetible.
Fuentes:
http://lafonoteca.net/grupos/nacha-pop
Comienzan a finales del 78, en el 79 telonean a Siouxsie & The Banshees y actúan en la presentación de Paraíso. En el 80 editan su álbum de debut “Nacha Pop” que tiene muy buena acogida. Es uno de los mejores discos del pop español, lleno de vitalidad, brillantes composiciones, sonido luminoso y una marcada influencia de la new wave británica. La revista Efe eme en 2003 lo colocó en el octavo lugar de los 100 mejores discos pop. De él hemos elegido la melancólica Chica de ayer, el tema de mayor éxito de la banda y uno de los himnos de La Movida, ¿Quién no ha oído? “Un día cualquiera no sabes que hora es / te acuestas a mi lado sin saber porqué / las calles mojadas te han visto crecer / y tú en tu corazón estás llorando otra vez”
Tras su debut fueron teloneros de los Ramones y actuaron en lugares míticos como Rockola. En el 82 publican su segundo álbum “Buena Disposición” que mantiene los esquemas de su primer disco aunque, en lugar de estar producido por Teddy Bautista, son ellos mismos los productores y fueron capaces de conseguir que estas canciones sigan sonando actuales a pesar de los treinta años transcurridos. Hemos elegido la enérgica e intensa Reflejo de ti que tiene un comienzo con aire siniestro que recuerda a grupos post-punk de principios de los 80; esta versión es una actuación en directo de 1983, una de las grandes bazas del grupo.
En 1983, abandonan Hispavox porque, como ocurrió con la mayor parte de los grupos de la época, las discográficas no cubrían sus expectativas en cuanto a ventas y firman por DRO, con la que lanzan, “Más Números, Otras Letras” , un disco irregular que pierde la frescura y la intensidad de los dos primeros pero que se enriquece con la introducción de teclados y sintetizadores, tan de moda en la época. Es un álbum más pausado que destaca por su conjunto más que por canciones puntuales aunque hemos elegido su momento cumbre: la vibrante Enganchado a una señal de bus, que dice: “No comprendo cómo puedes acostarte / para no dormir y luego levantarte / no comprendo la velocidad del tiempo / ni a la gente que no mueve ni un momento / voy andando hacia ningún lugar”. Con este disco no alcanzan el éxito masivo pero sí el reconocimiento de la crítica, como era habitual.
En 1984 sale a la luz “Una décima de segundo”, un maxi de cinco canciones entre las que sobresale la que da título al disco, Una décima de segundo, uno de las mejores temas surgidos del talento de Antonio Vega, en la que se unen física y poesía. El tratamiento de la canción es simple con la voz de Antonio en primer plano entre acordes limpios y una batería que sorprende por su claridad. El disco incluye una versión piano-bar con los teclados de Teo Cardalda. Con este maxi dieron por finalizada su corta estancia en DRO.
En 1985, y en la discográfica Polydor, editan uno de sus mejores trabajos: “Dibujos Animados”, un disco de madurez con un sonido más profesional y limpio que cuenta con la gran producción de Peter McNamme. Las voces siguen en primer plano y son Antonio y Nacho los ejes de las canciones aunque el sonido se enriquece con trompetas y teclados electrónicos. Hemos elegido dos temas. El que abre el disco es Grité una noche en el que la voz de Nacho da botes y en la que el grupo recupera su energía y frescura con guitarras de aire reggae y una llamativa orquestación y Relojes en la oscuridad, una perfecta canción pop, fresca y desenfadada, de ritmo frenético y una gran riqueza instrumental, reflejo de la madurez que han adquirido, destacando de nuevo los vientos y los ritmos acústicos de guitarra. Tras este disco Ñete deja la banda por desavenencias con el resto de los componentes y lo sustituye Sergio Castillo que no formará parte del grupo.
El cuarteto, ahora trío, se encuentra en uno de sus mejores momentos creativos como confirman en su último disco de estudio titulado precisamente “El Momento”, de 1987 producido por Carlos Narea y que supone su consolidación definitiva en cuanto a reconocimiento público y ventas. Pero, lamentablemente, la realidad se impone y las diferencias entre los dos compositores del grupo: Antonio y Nacho son cada vez mayores hasta el punto de que cada uno compone cinco temas del disco. La separación ya se vislumbraba. Hemos elegido uno de mis temas favoritos, el que abre el disco: No se acaban las calles, una canción en la que se unen fuerza y melancolía y Lucha de gigantes que formaría parte de la película Amores Perros de Alejandro González Iñárritu de 2000, una canción trascendente a través de su sencillez en la que la letra muestra la pequeñez y la fragilidad del individuo ante un mundo descomunal y lo perdidos que estamos ante una realidad que muchas veces nos sobrepasa.
En su cima creativa el grupo se separa y se despide, ante una multitud entregada, con dos conciertos en la sala Jácara de Madrid en octubre de 1988 que quedan plasmados para la posteridad en el disco “Nacha Pop 80-88”. Punto y final de uno de los grupos más inolvidables de una década irrepetible.
Fuentes:
http://lafonoteca.net/grupos/nacha-pop
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