A partir del debate realizado en clase de Comentario de Texto sobre el terrible vídeo difundido por el youtubers "ReSet" en el que este se mofaba cruelmente de un pobre indigente al darle unas galletas Oreo rellenas de pasta de dientes, los alumnos de 2º de Bachillerato A y B han reflexionado sobre la influencia que tienen en parte de la sociedad.
Ofrecemos a continuación el estupendo artículo realizado por el alumno de 2º de Bachillerato A, Mario Puente Dorado.
Esta gran plataforma llamada YouTube
alberga infinidad de tipos de videos: los “gameplays”, en los que el llamado “youtuber”
graba una partida de su videojuego; los video-blogs, donde un internauta graba un día cualquiera de
su vida con una cámara y lo comparte; y los videos tutoriales, cuya finalidad
es enseñar a realizar cualquier cosa, como una cuenta matemática o a montar un simple mueble. Estos tipos de “youtubers”
suben vídeos casi diariamente, sin duda alguna, sin intención de ofender, buscando
suscriptores y el puro divertimento o simplemente persiguiendo el ayudar a
alguien a través de un tutorial gratuito.
Sin embargo, no todo en esta
plataforma iba a ser bueno porque existe otro tipo de “youtubers”, los cuales
basan la temática de su canal y de sus videos en realizar diferente tipos de
bromas, muchas de ellas de muy mal gusto y altamente ofensivas, humillantes e incluso obscenas a personas
aleatorias que el susodicho “youtubers” encuentra en la calle. Es cierto que en
la televisión hemos visto programas de humor basados en bromas que se le hace a
la gente de la calle, pero estas bromas pasaban un filtro y en ningún momento
se pretendía ofender. Pero, ¿qué está ocurriendo ahora?. ¿Cuál es problema?
El problema radica en que estos “youtubers”
cuando llegan a un nivel alto de subscriptores, refiriéndome a millones de
personas, se convierten en “influencers”, como se llama actualmente, es decir, en
personas influyentes y famosas para un sector de la sociedad, sobre todo la más
joven. Por tanto todo el contenido que
suben, en este caso estas bromas de mal gusto, se propagan rápidamente por la
red y lo más grave de todo con gran éxito de aceptación. Ejemplo de esta
terrible influencia la tenemos en el caso del reciente "youtuber" ReSet o en el caso del “caranchoa”,
donde un youtuber insulta a un trabajador, provocando la reacción violenta del
afectado.
Por todo lo expuesto, podemos decir,
que lo único bueno de estos dos últimos casos (el de ReSet y el del “caranchoa”)
es que han sido castigados por la justicia y esto es una medida ejemplarizante
para todos aquellos que se dejan influir por ellos. En definitiva, debemos plantearnos
muy seriamente el fenómeno “youtubers” y
el hecho de utilizar estas plataformas para ver videos que nos hagan reír,
divertirnos o enseñarnos algo, pero no para ver a gente humillando a otras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario