Dedicamos el primer Popkesí de
Tras la disolución de Golpes
Bajos, Germán se alía con Nacho Cano para editar un maxi de tres canciones en
1986 con el nombre de “Nacho Cano-Germán Coppini”. El tema estrella del
disco, que no el mejor, es Dame un chupito de amor, un tanto épico y
recargado de arreglos pero muy en su línea.
En 1987 lanza su primer Lp en
solitario: “El
ladrón de Bagdad” que tuvo una buena aceptación y que fue presentado
en directo en las Fiestas de San Isidro. El primer single fue Alien Divino,
una balada muy ochentena que comienza con un ritmo sosegado y ecos jazzísticos
y que alcanzó el nº 1 de los 40 principales y una notable popularidad. Eran
todavía días de gloria para Germán antes de hacerse invisible para el gran
público, víctima del desinterés de la industria y los medios que no cuidan el
verdadero talento.
El mejor tema de este irregular
disco es el que le da título El ladrón de Bagdad que aglutina parte de la
temática recurrente de Germán: cine y ciencia y ficción junto una enigmática
melodía de banda sonora y elementos arábigos y que encierra ecos de lo mejor de
Morrisey, Miguel Bosé o Fernando Márquez.
Germán está considerado como una de las mejores voces de ese fenómeno
nacional y generacional que llamamos Movida, además de poseer una profunda
cultura musical y literaria y ser un inteligente integrador de diferentes tipos
de música siempre bajo la marca de su cálida voz.
En 1989 graba su segundo álbum: “Flechas Negras”,
un disco de versiones, en su mayoría, de clásicos soul de los 70 y en el que
colaboraron en las letras Pablo Sycet y Luis Carlos Esteban. El primer sencillo
fue Mujer,
versión del Alone again or
perteneciente al disco “Forever changes” de 1967 de la banda Love, uno de los
primeros grupos multiétnicos de EEUU, liderado por Arthur Lee. El disco es
bastante intrascendente pero, al menos, no comete excesivos atropellos con las
versiones lo que, en un disco de estas características, ya es bastante.
En la primera mitad de los 90
Germán Coppini se mantiene un tanto alejado del primer plano y colabora
esporádicamente con otros artistas. En 1996 aparece su tercer y mejor disco: “Carabás”,
un homenaje al Gato con Botas, en una línea más alejada del pop con ritmos españoles y latinos. Es un disco de muy agradable escucha como demuestra Mujer pirata,
una bella canción con sabor a cine rodado en blanco y negro.
Es su disco más personal y en él se
rodea de colaboradores como Jorge Pardo, Joe Borsani, Antonio Soteldo
“Musiquita” o Enrique Heredia “El Negri” de La Barbería del Sur que canta a dúo
con Germán la emotiva Moreno y Claro.
En 1997 Nuevos Medios publica, con gran éxito, un
recopilatorio con todas las grabaciones de Golpes Bajos lo que supuso la
reunificación del grupo y la consiguiente gira que quedó plasmada en el disco
“Vivo”, pero ante el discreto éxito
comercial el retorno resulta fallido. No será hasta 2006 cuando Germán Coppini
lance un nuevo disco: “Las canciones del
Limbo”. Durante todo este tiempo sigue componiendo y colaborando con otros
artistas y formando parte del grupo Anónimos. Se trata de un disco de canciones
electrónicas recopiladas desde 1999 y que llegaba muy tarde cuando esos ritmos
ya estaban desfasados. Su mayor problema es la falta de homogeneidad y algunas
letras un tanto mediocres. Los temas más destacados son los más electrónicos
influenciados por Fangoria como Manouche con cierto aire a Tricky y Portishead. La
revista musical Efe Eme, en enero de 2007,
colocó al álbum en el puesto diecinueve de lo mejor del año a nivel
nacional.
Germán colabora con los grupos
Maga, Casquivanos y Néctar y es componente de Lemuripop junto a Álex Brujas con
dos discos en el mercado. En 2013 publica acompañado de Los Voluntarios el
disco “América
Herida” en el que reinterpreta y adapta las canciones y el mensaje
de los grandes de América Latina como Víctor Jara, Violeta Parra, Pablo
Milanés, Chico Buarque o del uruguayo Daniel Viglieti: Milonga para andar lejos. Germán afirmó que su intención era preparar
una selección de Canciones profundas que testimonian estados del alma,
heridas que no se han cerrado (de ahí el título del disco), pero que llevan en
todas ellas una carga poética". Este disco recuperó al mejor Coppini,
un auténtico modelo de compromiso ético y estético. Descanse en paz. Sin él sí
que ahora serán de verdad malos tiempos para la lírica.
Fuentes:
2 comentarios:
Muy merecido homenaje del conductor de “Popkesí” al recientemente fallecido músico Germán Coppini. Parafraseando una de sus canciones más célebres, “malos tiempos para la lírica”, tanto por su triste desaparición como por la situación en la que se encuentra el mundo en el momento de su partida.
Sin duda, la carrera de Coppini ha sido una de las más interesantes de los últimos cuarenta años en España, tanto por la variedad de sus propuestas como por el alto nivel de creatividad desarrollado: una voz muy singular y manejada con inteligencia, unas equilibradas composiciones en las que las letras son tan importantes como la música, y una inquietud intelectual de muchos quilates hacen de Coppini uno de los nombres fundamentales en la historia del pop español del último medio siglo. Así de sencillo.
Muchas gracias al profesor Alfonso Romero por ofrecernos este muy documentado y emocionante homenaje a uno de esos músicos que dejan profunda huella.
Me sumo al agradecimiento de nuestro incondicional seguidor en el blog, porque Germán Coppini siempre formará parte de la vida de muchos de nosotros.
Temas como "No mires a los ojos de la gente" o "Malos tiempos para la lírica", pertenecientes a su época de "Golpes bajos", son inolvidables y son parte de nuestra biografía.
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